“Coleccionar obras de arte es como un veneno dulce”, lo dice Rodolfo que lleva más de cuarenta años disfrutando de su colección particular, que incluye un cuadro de Sorolla que muy bien podría estar en el Museo de El Prado. “Cometería un delito, robaría por tener un cuadro de Tapies”. Hasta este punto estaría dispuesta a llegar otra gran coleccionista española. Una mujer que ha construido su casa para acoger su gran colección artística que distribuye por todas la dependencias incluidos el baño y la habitación de los niños. José Luis colecciona tallas religiosas y ha convertido su casa en un auténtico templo repleto de figuras de ángeles que datan del siglo XVIII. El coleccionismo es una pasión sin límites que cada día comparten más personas en el mundo. 25 millones de personas coleccionan obras de arte y varios centenares viven en nuestro país. Por obra de arte es un reportaje de Alejandra Andrade.