La familia De la Torre se ve afectada directamente por lo ocurrido: la preocupación por el estado de Fernando, la consciencia de Mercedes respecto al encuentro de Fernando con Alejandra y la angustia de Isabel respecto al inmediato futuro de Hugo, detenido tras su directa implicación en el intento de golpe de Estado. Y Ludi que, aunque no le dirigía la palabra a Rafael desde que le confesó que estaba casado, no puede evitar besarle cuando se reencuentra con él tras los angustiosos días pasados.
Como consecuencia directa del intento de golpe de Estado se acelera la aprobación de la Ley de Reforma agraria, por lo que Alejandra y Encarna deben aplicarse con más firmeza a su trabajo. Por su parte, Fernando inicia acercamientos a José Antonio Primo de Rivera que, al igual que él, inicia su carrera política. Mientras, Isabel visita a un Hugo encarcelado y que sufre terriblemente debido a su dependencia de la morfina que ahora no puede conseguir. A pesar de que éste se lo hace prometer, Isabel contacta con Fernando Alcázar dispuesta a todo con tal de sacar a su marido de la cárcel. Mientras, Beatriz acepta ir a pasear con Dieguito Ferrán y comprueba, decepcionada, que es imposible que él sea el autor de los anónimos.
Llegan noticias sobre el futuro juicio de Ventura y Encarna se desespera. Termina emborrachándose y Amparo la acompaña a casa. Una enamorada Amparo promete a Encarna que hará todo lo posible por Ventura.
Además, Jesús no consigue olvidar el beso con Mercedes y va a buscarla, aunque ella le rechaza reafirmándose en su matrimonio. Sin embargo, la realidad es que ya que ni Mercedes ni Fernando pueden olvidar lo ocurrido con Jesús y Alejandra, respectivamente.
Mientras Fernando de la Torre media con José Antonio para conseguir la libertad de Hugo, Alejandra termina el listado de fincas que corren el riesgo de ser expropiadas si la Ley de Reforma Agraria entra en vigor. Entre ellas se encuentra la finca de la familia De la Torre, lugar al que termina llegando Mercedes en busca de Jesús.