“Conversaciones secretas” es una producción compleja, de apariencia sencilla. Se rueda con siete cámaras de alta definición y un equipo de trabajo que ronda las 30 personas.” Así comienza Juan José Millás a definir su nuevo espacio “Conversaciones secretas”, que estrenará CANAL+ a partir del 25 de junio a las 19:15 horas.
“Las cámaras, Canon, pequeñas y ligeras, permiten ser utilizadas, según el viejo sueño de Gonzalo Suárez, como si fueran bolígrafos. Para levantar el guión se escogen primero diversas localizaciones relacionadas con la vida del personaje que presentamos, colocándose las cámaras en lugares estratégicos. Así, si rodamos en una calle, puede haber una dentro de un coche, otra en una ventana de los alrededores, una más, con teleobjetivo, en un ático, etc. El protagonista del reportaje ignora dónde se encuentra cada una y enseguida se olvida de su presencia. De este modo, la conversación parece “robada”.
Nos estrenamos con Joaquín Sabina, con el que recorrimos el Madrid de sus aventuras y sus canciones, antes de recalar en su casa, que recorrimos también de arriba abajo, para finalizar el reportaje con una larga y divertidísima entrevista en la que también participa Ximena, su mujer”, continúa Millás.
Se trata de un formato que convierte al espectador en un espía de una entrevista de Juan José Millás a un personaje relevante de nuestra cultura. La grabación se lleva a cabo en escenarios importantes de la vida y la carrera del entrevistado utilizando cámaras ocultas, lo que fomenta la intimidad y naturalidad del resultado. Joaquín Sabina, Ferrán Adriá o Carmen Maura son algunos de los personajes que conversarán secretamente con Millás.
PONGAMOS QUE HABLO DE MADRID…
Millás queda con su invitado en la calle de Tabernillas, en Madrid, en el corazón de La Latina, el antiguo barrio de Joaquín Sabina. Aquí, el cantautor tuvo su primera casa alquilada sin ascensor, su primera y única mujer: Lucía, y su primer lugar profesional de ensayo. Joaquín le comenta a Millás que “no ha cambiado mucho el barrio desde entonces” y, agarrados del brazo, como un par de amigos que se reencuentran después de muchos años, ambos se encaminan hacia La Mandrágora. Entre comentarios discretos que una de las cámaras instaladas en el camino es capaz de captar, Joaquín le confiesa a Millás que hace muchísimos años que no sabe nada de Lucía, y Millás aprovecha para preguntarle si “¿tú siempre has vivido con una mujer?”. Risas, complicidad y asentimiento Sabina responde: “siempre he vivido acompañado”.
Así comienza este encuentro discreto seguido por el objetivo de infinidad de cámaras…