Mediaproducción SL (MEDIAPRO) ha superado hoy el último de los trámites procesales y ha salido de la situación de intervención concursal en la que se encontraba desde junio de 2010, recuperando plenamente la normalidad absoluta en su gestión diaria. En este sentido, el Juzgado Mercantil nº 7 de Barcelona ha comunicado hoy el rechazo de todas las objeciones que PRISA había planteado al convenio de acreedores de Mediaproducción SL. Esto significa, en la práctica, el levantamiento de todas las medidas de intervención y de control por parte de la administración concursal. El convenio aprobado prevé el pago del total del pasivo ordinario, sin quitas, en un plazo de 35 meses. Este convenio, apoyado por las entidades financieras y por la gran mayoría de los acreedores, fue votado y aceptado en diciembre del 2010 y sólo contó con el único voto en contra y la oposición reiterada de las empresas del Grupo PRISA (Audiovisual Sport, Distribuidora de Televisión Digital y PRISA TV).
El concurso de acreedores fue solicitado de forma voluntaria por MEDIAPRO, en junio del 2010, ante la decisión de Sogecable, manifestada por escrito, de no cumplir con sus obligaciones de pago correspondientes al contrato por los derechos de emisión del fútbol. Elementales normas de prudencia aconsejaron a MEDIAPRO solicitar la protección judicial mediante la apertura de un concurso de acreedores. En ningún momento ha peligrado la viabilidad y actividad de Mediaproducción SL, que ha seguido desarrollándose con total normalidad.
MEDIAPRO estudia la presentación de una demanda contra PRISA por los daños y perjuicios ocasionados tanto por la entrada en concurso (motivada por el incumplimiento de sus obligaciones contractuales) como por todas las maniobras dilatorias que ha llevado a cabo durante todo el proceso, y que han sido rechazadas sistemáticamente tanto por parte del Juez como de la administración concursal. El punto culminante fue la recusación por parte de las empresas del Grupo PRISA del Magistrado del Juzgado Mercantil nº 7 de Barcelona, encargado del concurso. La recusación fue rechazada rápida y tajantemente por la Audiencia Provincial de Barcelona, la cual en su auto de rechazo de la recusación acusó a PRISA de únicamente “pretender la dilación del procedimiento”, añadiendo que su actuación constituía “un claro abuso de derecho procesal”. La recusación de un juez es un hecho insólito en los juzgados mercantiles de Barcelona. La Audiencia Provincial ni siquiera aceptó darle trámite en una rápida pero muy motivada resolución tomada en apenas quince días.