Aurora se repone de la sorpresa y hace averiguaciones sobre el paradero de su “amiga” Ana. Aurora se compromete a declarar ante la Guardia Civil y declara que fueron asaltadas. María cuida a Aurora y le sirve como fuente de información involuntaria sobre Ana.

Mientras tanto, Rosario cuida a Ana con la ternura y el cariño de una madre. Francisca ofrece toda su ayuda a Tristán para encontrar al agresor de las niñas. Gonzalo pide ayuda a Francisca para encontrar a los agresores de Aurora, pero cuando va a la Casona casi termina peleándose con Fernando. Es entonces cuando María despide a Gonzalo y le pide disculpas marcando una distancia que desconcierta al sacerdote.

Raimundo confiesa a Emilia lo que sucede entre León y Francisca y sus propias sensaciones. León declara sus sentimientos a Francisca y la Montenegro lo rechaza de plano. Pedro no puede ocultar más a Quintina la repentina y extraña ausencia de Hipólito.

Pedro telefonea a Dolores para confesarle que Hipólito ha desaparecido y es Dolores quien da razón a Pedro sobre paradero de su hijo, pero no puede hablarle de sus razones. Pese a que Alfonso y don Anselmo consiguen renegociar los impuestos de los Buendía, Aníbal no parece contento.

Emilia consigue que Rita le confíe que los problemas económicos de la familia son muy graves. Alfonso y Emilia deciden ofrecer el puesto de trabajo vacante en la posada a Rita, la novia de Aníbal. Fernando y Gonzalo se enzarzan en una pelea sin testigos para dirimir sus diferencias.

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