El intérprete, que alcanzó gran fama internacional como protagonista de la serie “Falcon Crest”, será cómplice de Leonor, enferma de narcolepsia, en el mensaje de agradecimiento que ésta trasladará a María José, seguidora del actor y única persona que la ha ayudado a sobrellevar esta dolencia
El propósito de Carlos de reencontrarse con su hermana Mari Mar y el deseo de Yolanda de conocer a sus hermanos, hijos de su verdadero padre, formarán parte del resto de historias de esta entrega
Una nueva estrella internacional “aterriza” en el plató de “Hay una cosa que te quiero decir”
Tras las recientes visitas de David Hasselhoff, La Toya Jackson y Pamela Anderson, el actor norteamericano Lorenzo Lamas, que alcanzó gran fama internacional tras dar vida a Lance Cumson, nieto de la carismática Angela Channing, en “Falcon Crest”, una de las series que marcaron la historia de la televisión en España, estará presente el jueves en la nueva entrega del programa que Jorge Javier Vázquez conducirá en Telecinco a partir de las 22:00 horas.
El intérprete californiano, de origen argentino, protagonizará una de las historias de la noche: será cómplice de Leonor, una mujer enferma de narcolepsia, en el mensaje de agradecimiento que ésta trasladará a María José, gran seguidora del actor. Leonor quiere ver cumplido el sueño de su amiga de conocer a su ídolo, ya que es la única persona que la ha ayudado a afrontar los síntomas de su dolencia.
Otras historias de la noche
Los espectadores también podrán seguir nuevos casos como el de Carlos, que visitará el plató con la intención reencontrarse con su hermana Mari Mar. Ambos son hijos del mismo padre, ya fallecido y del que Carlos se distanció a los 11 años. Además, el programa también tratará de hacer realidad el deseo de Yolanda de conocer a sus hermanos, única familia de su verdadero padre, al que conoció poco antes de morir éste gravemente enfermo.
Por último, Fran acudirá al plató para lanzar ante su madre un mensaje de arrepentimiento y la promesa de que hará todo lo posible para no volver a padecer trastornos alimenticios como la bulimia y la anorexia, que le han dejado secuelas físicas permanentes y que en el pasado han generado un gran sufrimiento a su progenitora.