Siguiendo con el repaso de lo que ha ido aconteciendo en 2014, en este caso nos vamos a centrar en lo que nos ha dejado la televisión nacional entre mayo y agosto, los primeros meses de calor, época complicada para los programadores de las cadenas, ¿o es que ellos también están de vacaciones en estas fechas?

MAYO

El evento más señalado de este mes siempre es Eurovisión, esta vez fue Ruth Lorenzo la representante de España, y ha demostrado ser muy televisiva, porque a raíz del festival europeo la hemos podido ver en unos cuantos programas tanto de Atresmedia como de Mediaset.

Antena 3 aprovechó este mes para lanzar una de sus ficciones más esperadas, ‘Sin Identidad’. La serie de Megan Montaner tiene un importante número de fieles seguidores, tanto es así que el thriller se ha asegurado una segunda temporada en la que la protagonista llevará a cabo la ansiada venganza. ‘Sin Identidad’ ha sido comparada desde el principio con ‘Revenge’, pero parece que ha sabido emular lo mejor de la serie estadounidense. En Telecinco este mes estuvieron volcados con otro estreno, ‘Resurrection’, rara vez un canal generalista da tanto bombo a una serie internacional, pero en Telecinco probaron con la promoción insistente, el resultado fue positivo las primeras semanas, luego se fue desinflando, como suele ocurrir.

Cuatro, en su línea desesperada, lanzó una telenovela en la sobremesa, ‘Avenida Brasil’, con desastrosos datos de audiencia; no le fue mucho mejor al regreso de Patricia Conde en Mediaset, que a duras penas llegaba al 5% de share con ‘Ciento y la Madre’.

JUNIO

Unos vienen y otros se van, eso nos quedó grabado a fuego en junio de 2014. La despedida de ‘Aída’ dio paso a otra comedia que se estrenó con éxito en Telecinco, ‘Chiringuito de Pepe’. Pero los personajes de Esperanza Sur no fueron los únicos que marcharon, el Rey Juan Carlos I dijo adiós, y le relevó en el trono su hijo Felipe VI. Muchos programas se hicieron eco de la abdicación, un bombazo que marcó el mes de junio por encima de cualquier acontecimiento televisivo.

Dos programas se estrellaron estrepitosamente este mes, ‘¿Ex, qué harías por tu hijos?’ (solo con el título no sé cómo se atrevieron a darle luz verde), y ‘El Pueblo Más Divertido’ (ídem). El primero pecaba de exceso de morbo gratuito, un grupo de madres y padres chonis reunidos como si de un ‘Gran Hermano’ low-cost se tratara, no cuela, Emma. El segundo no tenía ni pies ni cabeza, con una Mariló Montero que empieza a estar hasta en la sopa, y todo por sus constantes meteduras de pata y burradas políticamente (y fonéticamente) incorrectas, en La 1 solo les faltó sacar a Montero con vestido de faralaes y una pandereta en cada mano.

Es el mismo mes en el que Cuatro empezó a apostar por ‘Todo Va Bien’, y sorprendentemente sigue haciéndolo. A pesar de los incontables cambios de horario, de tono e incluso de formato, el espacio de Xavi Rodríguez y Edurne está abocado al fracaso, aun así lleva ya medio año en antena.

JULIO

Llega el verano, y por si alguien no lo sabía de antes, es cuando las televisiones aprovechan para emitir todos los productos que guardaban en el cajón, bien por pereza, o simplemente porque no confiaban en el potencial de estos programas, ‘Bella y Bestia’ en Cuatro, o ‘Rehenes’ y ‘Arrow’ en laSexta son algunos de los ejemplos que pasaron, sin pena ni gloria, el verano en nuestra tele.

También os costará hacer memoria para recordar ‘Capitán Q’, con Quico Taronjí en La 1, o ‘Fogones Lejanos’, el enésimo docushow de Cuatro en el que esta vez se mezclan la gastronomía y los viajes. Lamentablemente, es todavía más difícil de olvidar el especial sobre Paquirrín que Telecinco se sacó de la manga, ‘Así es Kiko Rivera’, con esto tuvieron material para ‘Sálvame’ durante todo julio, ellos se lo guisan y ellos se lo comen.

AGOSTO

Más de lo mismo, o mejor dicho, menos de lo mismo, este año en agosto no han reemplazado los programas fracasados por otros nuevos, seguíamos teniendo en la parrilla episodios de series internacionales que no llegaban a los dos dígitos de share, realities muertos desde el momento en el que vieron la luz, o reposiciones, que curiosamente hacían mejores datos que algunas películas (archirepetidas también).

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