La Escuela de Decoración abre sus puertas el sábado en laSexta. A partir de las 11:00 de la mañana arranca un espacio en el que la decoración transformará la vida de sus protagonistas de cada entrega. El programa, que nace con la vocación de reflejar el impacto de la decoración en la vida de la gente, cuenta con un equipo de expertos dirigidos por Lorenzo Meazza, director de La Escuela de Decoración, que les darán las claves para lograr el cambio.
El programa, creado por Globomedia para laSexta, cuenta con la colaboración de IKEA como experto asesor en el desarrollo del contenido del mismo.
En esta primera entrega, los coaches de La Escuela de Decoración se enfrentan a dos retos: ayudar a renovar el salón de un piso compartido por tres jóvenes y el dormitorio de un adolescente.
Dani, Fabio e Itziar son tres compañeros de piso que han tomado la decisión de renovar su salón para pasar más tiempo juntos. Hasta ahora, cada uno se recluía en su dormitorio y evitaban pasar tiempo en el salón. Se quejan de que es un espacio que no invita a la convivencia. Está “amueblado” con dos camas que hacen las veces de sofás, duros como piedras, una vieja mesa, un mueble bar y un colchón apoyado en la pared. Carece de las funciones propias de un salón.
El coach les ayudará a buscar soluciones para su salón, se enfrentará al reto de unificar los gustos, personalidad y deseos de cada uno de ellos.
El otro reto es el de Víctor, es un chico de 15 años que tiene un dormitorio infantil y necesita adaptarlo a sus nuevas necesidades, propias de su edad. Sus prioridades son las de cualquier chico adolescente: tener más espacio para estudiar y, lo que es más importante, poder invitar a sus amigos a dormir.
Sus padres creen que ha llegado el momento de premiar a su hijo con una nueva habitación porque hace un esfuerzo constante para sacar a flote sus estudios ya que padece una enfermedad rara, el Síndrome de Joubert. Actualmente, como no tiene espacio en su dormitorio, Víctor hace los deberes en la mesa de la cocina, donde cada día refuerza sus clases con una profesora de apoyo.
La Escuela de Decoración asesora al chico y a sus padres para sacar mayor partido a la habitación, con el objetivo de ganar espacio, y conseguir que Víctor tenga un lugar idóneo de trabajo y ocio.