Renovada por una segunda temporada y con un disco oficial en el mercado, ‘Yo quisiera’, serie protagonizada por Lucía Gil y Christian Sánchez, culmina el jueves 28 de enero su primera temporada en Divinity como el contenido estrella del sello temático ‘Diviniteen’ y anotando un registro acumulado del 19,3% de share en las becomers (espectadoras de 13 a 15 años), target en el que casi duplica a Antena 3 (10,6%) y prácticamente quintuplica a Nova (3,9%).
En el desenlace de la ficción que el canal femenino ofrecerá a las 20:00 horas, Lana, feliz tras retomar los ensayos musicales con André y tras el éxito de su primer concierto con el cantante, consciente de la gran complicidad existente entre ambos. Las dudas que le plantea al joven su relación sentimental con Patricia y la inminente participación en el casting del talent-show ‘Misión Talento’ podrían hacer realidad el sueño de la bloguera: iniciar un romance con el apuesto camarero del Colegio Hispanoamericano.
Lucía Gil invita a las espectadoras de la serie a no perderse el desenlace de la temporada “porque es inesperado, sorprendente y les va a dejar con ganas de mucho más”, mientras que Christian revela que “el capítulo final va a dejar muchas tramas abiertas. Hay que verlo porque va a generar muchas incógnitas para la segunda temporada”.
De cara a la próxima grabación de los capítulos de la segunda temporada, la actriz expresa un doble deseo: “Me gustaría que en la segunda temporada entrara como nueva alumna María Parrado, con la que me llevo genial, y que en ‘Micro abierto’ actuara mi amigo y guitarrista Rubén Tajuelo”.
Araceli amenaza la audición de Lana y André en el casting de ‘Misión talento’, en el desenlace de la temporada
Tras el éxito del concierto, Lana y André son invitados a participar en el casting del conocido talent-show ‘Misión Talento’. Ilusionados con causar una buena impresión al equipo del programa durante su audición, los jóvenes se sorprenden sobremanera al descubrir que Araceli, la ambiciosa y exigente productora musical, forma parte del jurado del concurso. Controlar los nervios y brillar con luz propia durante su actuación sobre el escenario será la doble prioridad de la pareja, que luchará por impresionar al jurado con su talento musical. Entretanto, Jorge crea graves problemas a su familia y será Diego quien pague por sus errores.
Además, Patricia, la novia de André, llevará a cabo una acción desesperada que conllevará consecuencias imprevisibles.
