Basada en la novela de Paloma Sánchez-Garnica, recrea una historia de amores prohibidos y familias enfrentadas, en una cuidada producción de época
Lucía Jiménez, Fran Perea, Claudia Traisac, Joel Bosqued, Fernando Soto y Chani Martín, entre otros, completan el reparto
Dirigida por Iñaki Peñafiel y Peris Romano, con guión de Rodolf Sirera, Peris Romano, Anaïs Schaaff, Javier Olivares y Sergio Barrejón
La serie tendrá una cuidada web en RTVE.es con más contenidos y entrevistas
Estreno el martes 13 de septiembre a las 22:30 en La 1
RTVE estrena este martes ‘La sonata del silencio’, un drama romántico protagonizado por Marta Etura, Eduardo Noriega y Daniel Grao. La serie de nueve capítulos, basada en la novela de Paloma Sánchez-Garnica, trasladará al espectador al Madrid de 1946 para contar una historia de familias que arrastran su pasado y también la historia de Marta y su hija Elena, dos generaciones que intentan cambiar el mundo que les rodea
‘La sonata del silencio’, nueva producción de RTVE en colaboración con José Frade PC, es sobre todo una historia de amor; de amores prohibidos, de amores secretos, de amores imposibles… Un drama romántico ambientado en la sociedad de finales de los 40, vista a través de los ojos de una mujer dispuesta a liberarse del yugo del machismo y decidida a tomar el control de su vida cueste lo que cueste.
Marta (Marta Etura), una mujer con un futuro prometedor, se verá atrapada entre dos hombres. Obligada a trabajar para salir adelante, se expondrá a las murmuraciones de los vecinos, a la indignación de su marido Antonio (Daniel Grao) y a los celos de Rafael (Eduardo Noriega).
El punto de encuentro de los personajes se sitúa en la madrileña Plaza del Ángel. Un edificio cualquiera, donde la riqueza y la pobreza, el triunfo y el fracaso sólo están separados por un tabique. En el viven dos familias enfrentadas, los Figueroa, que lo tienen todo, y los Montejano, que lo tuvieron todo y ahora tratan de sobrevivir. Ambas exponen sus desgracias y alegrías a la mirada del resto de vecinos. El inmueble es testigo mudo de su día a día, su historia y su pasado.
Una cuidada producción de época
La puesta en escena y la cuidada realización, con decorados reales y localizaciones naturales, traslada al espectador al Madrid de los años 40 y muestra cómo era la Gran Vía, el bar Chicote, la embajada Francesa, el Hotel Palace, la Estación de Atocha, o un paseo por el barrio de las Letras, con una apuesta estética que es obra de la creadora artística Virginia Flores, con la colaboración de Stargate Studios.
La música es otro de los motores de la narración, con piezas clásicas y reconocibles, y otras de creación propia, que sirven de motivación vital para los protagonistas en sus aspiraciones, sus sentimientos, sus recuerdos, a la vez que es un vehículo emocional para los espectadores.
Personajes principales
Marta Ribas (Marta Etura) es una mujer hermosa e inteligente que soñaba con ser pianista y dar conciertos por todo el mundo. Hija de diplomáticos, creció viajando de país en país, recibiendo una educación exquisita, dominando más de cinco idiomas y con la carrera de piano terminada a edad muy temprana. Con 17 años se enamora de Antonio Montejano, y aparca su sueño de convertirse en concertista, en favor del matrimonio y sus ganas de ser madre.
Antonio Montejano (Daniel Grao) es médico aunque apenas ejerció al verse obligado por la muerte de su padre y varios de sus hermanos a hacerse cargo del negocio familiar. Un negocio próspero como anticuario que se vino abajo con la guerra y le dejó lleno de deudas. El matrimonio y su hija Elena tendrán que abandonar su lujoso piso y trasladarse a un desacomodado desván. Privados de su casa y su medio de vida, viven casi de la caridad de Rafael que les ofrece su ayuda en un oscuro intento de mantener al matrimonio dependiente y sometido.
Rafael Figueroa (Eduardo Noriega) es un reputado notario que observa todo desde su pedestal de poder, estatus social y riqueza. Casado y padre de tres hijos, a ojos de la sociedad es el prototipo de prohombre de la España del nuevo régimen, aunque en realidad vive atormentado por la culpa y la responsabilidad por el devenir de Antonio. Rafael mantiene una lucha interna entre el bien y el mal, debatiéndose entre la amistad o el amor. Odia a su esposa de la que nunca estuvo enamorado porque en realidad ama a otra mujer.
En medio de los dos amigos, Marta siente como la vida se le escapa de las manos, obligada a la sumisión. Pero cuando Antonio cae enfermo se verá en la tesitura de tener que aceptar un trabajo que va a cambiarle por completo. Rafael y Antonio por su parte, y cada uno a su manera, tratarán de anular las iniciativas de Marta y ahogar sus sentimientos.
Capítulo 1: ‘Marta’
Marta Ribas tuvo una infancia y una juventud feliz. Hija de diplomáticos, soñaba con ser concertista de piano. La guerra civil le acarreó la ruina a Antonio, su marido, un médico dedicado al negocio de antigüedades y Marta hubo de olvidar sus ilusiones. Ellos y Elena, su hija, que trabaja en una zapatería, han debido abandonar el piso que ocupaban frente al del matrimonio formado por Rafael y su familia, para subir a uno más modesto en el último rellano.
Rafael es amigo de juventud de Antonio y de Marta, y con la esposa de aquél, Virtudes, pasaban juntos los veranos antes de que estallara la contienda. Rafael le ha dado trabajo a Antonio en su despacho de notaría. Pero las relaciones entre todos ellos son cada vez más tirantes: hay muchos secretos del pasado que permanecen ocultos y les atormentan. Antonio está en la cárcel, y Rafael y don Próculo, un sacerdote amigo de la familia, proponen un acuerdo para exculparlo. Pero la salud de Antonio está ya muy deteriorada.