Tristán intenta tranquilizar a Candela pero los dos saben que, si Francisca ha comprado la pastelería, no puede significar nada bueno. Vladimiro cree que Pedro no está preparado todavía para enfrentarse a Olmo. Pedro está angustiado por su inminente derrota y Dolores por el inminente avance del comunismo.
Muerta de miedo, Dolores atiende a dos rusos misteriosos con la ayuda de Aurora. Mauricio informa a Francisca del excesivo interés que tiene León por trabajar con Raimundo. León admite que ha venido a saldar cuentas con Raimundo Ulloa. María se ha levantado llena de energía, mientras Candela se interesa por su salud, Mariana le cuenta que está mejor que nunca.
Emilia vuelve a prevenir a su hija, esta vez con argumentos, en contra de Aurora. Olmo se excusa por el plantón de ayer pero tampoco hoy quiere quedar con ella. Soledad acusa a Federico de haberla engañado. Él le asegura que está equivocada pero no da motivos. Mariana confiesa a su madre que le da miedo el ansia de venganza de Soledad.